Por: Javier Diez Canseco

Paralizada la Ley General de Personas con Discapacidad que el Congreso aprobara por unanimidad pero el Ejecutivo observó meses atrás, el Presupuesto Fiscal 2013 se discutirá –a mediados de noviembre– sin contemplar las obligaciones que la Ley observada establece debe cumplir el Estado. Grave para cerca de 4 millones de personas con discapacidad en el Perú.

El 2011 logramos se asigne un fondo para una Encuesta Nacional sobre Discapacidad que debe culminar el 2012 (S/.8 millones) y que se elabore un Presupuesto por Resultados (PpR) para políticas en relación con discapacidad. Ha tomado un año elaborarlo. No se aplicó el 2012, se haría el 2013.

En realidad, el Presupuesto por Resultados (PpR) del 2013 es muy pequeño y puntual, frente al abandono sistemático del sector. Hay tres programas presupuestales en materia de discapacidad (salud, educación y empleo), parte de la Estrategia Multisectorial “Inclusión Social Integral de las Personas con Discapacidad”, articulada por el CONADIS. El PpR en Educación (“Inclusión de niños, niñas y jóvenes con discapacidad en la educación”) recibirá S/. 29’215, 922 (S/. 26’641, 095 Gob. Nacional y S/. 2’574, 827 Gob. Regionales).

El PpR en Salud/Rehabilitación (“Inclusión social integral de las personas con discapacidad”): S/. 12’596, 741 (S/.12’550, 151 GN y S/.46,590 GR). Y el PpR Empleo (“Inclusión de los jóvenes con discapacidad en el mercado de trabajo”): S/. 850,300 (GN). Quedó fuera un PpR sobre accesibilidad y barreras arquitectónicas y en comunicaciones. Pero el PpR sobre deporte, a cargo del IPD, incluye nada menos que S/. 119,623 para deporte exclusivo para personas con discapacidad. En total, apenas S/. 42 millones 663 mil soles adicionales en los tres sectores del PpR para discapacidad, representando apenas el 0.1% del total destinado a programas presupuestales de este año: S/. 42.6 millones en un Presupuesto 2013 que  asciende a S/.108,000 millones de soles.

Por otro lado, el CONADIS (órgano rector de políticas sobre discapacidad para 4 millones de personas) tendrá un presupuesto de S/. 8’520, 488 (un millón cuatrocientos mil es dinero directamente recaudado). Para comparar, el SENAMHI o la Biblioteca Nacional reciben 22 millones de soles. El Fuero Militar Policial recibe más.

Sin embargo, el Presupuesto 2013 visibiliza mejor los fondos destinados a discapacidad. En educación, aparte del PpR sobre discapacidad, asignan S/. 34.5 millones para el desarrollo de la educación especial (será funcionamiento de escuelas especiales) y S/. 1.6 millones para el desarrollo de la educación básica especial (¿Dirección de Básica Especial?). En salud, aparte del PpR, hay S/. 13.6 millones para apoyo a la rehabilitación física (¿INR?), S/. 5.8 millones para apoyo al ciudadano con discapacidad (¿?) y S/. 17 millones para servicios de rehabilitación en el Hospital Hipólito Unanue de Lima Este. Dan  S/. 7.4 millones al PpR de salud mental. En empleo, asignan generosos S/. 300 mil soles para “promover el desarrollo e integración de la persona con discapacidad” (debe ser la Oficina Nacional de Promoción Laboral para Personas con Discapacidad). Y, en poblaciones vulnerables, asignan S/. 2.2 millones para atender a niños y adolescentes con discapacidad (?) y S/. 5.8 millones para apoyo a las beneficencias (que atienden a personas con discapacidad).

El Presupuesto no ha considerado los artículos que autorizaban a los gobiernos regionales y locales a destinar parte de su presupuesto mensual para la mejora de la accesibilidad (hasta 0.5%) y de sus Omaped y Oredis (hasta 2 UIT) que el Congreso incluyó en anteriores presupuestos y no sabemos si se aplicaron.

Deberían incorporarse artículos adicionales en favor de las personas con discapacidad como las exoneraciones para el nombramiento de docentes de educación especial, los intérpretes de lengua de señas, incremento de pensiones de invalidez y orfandad, fondos para el deporte, etc. Y claro, un presupuesto mayor y proporcional al volumen de personas con discapacidad que hay en el Perú. Pero parece ser pedir peras al olmo cuando ni siquiera logramos se promulgue una Ley General de Personas con Discapacidad que simplemente concreta la aplicación de la Convención de la ONU sobre los derechos de las Personas con Discapacidad.